¿RECONSTRUCCIÓN?
(Piura, 19 marzo 2019)
Luis Gulman Checa
El presente fue inspirado por la primera
plana de la edición de “El Tiempo” de la víspera. Sin embargo, reconozco que
desde el principio consideré exagerado hermanar los perjuicios originados por
el período lluvioso del 2017 con el concepto RECONSTRUCCIÓN, que es idóneo tras
terremotos de alta intensidad, ciclones o tsunamis auténticos.
Por ejemplo, la citada primera plana apareció
con una fotografía aterradora de aquel verano, cuando el río Piura incrementó
tanto su caudal que el nivel de las aguas superó la plataforma del puente
Cáceres. Entonces, por asociación de ideas, hablar de reconstrucción acompañando
tal fotografía, tendría que llevarnos a concluir que el puente fue
destruido/arrasado por el río.
Sin
embargo, no solo ello no ocurrió sino que, por más que me
rompo el coco, no identificó ninguna edificación que fuera destruida a
consecuencia del denominado Niño Costero, por cuanto, las edificaciones
construidas sobre terrenos que fueron inundados, modestas u ostentosas, tampoco fueron destruidas y solamente
sufrieron algunos daños que requirieron reparaciones/mantenimientos.
Hablo así por haber sido testigo y sufrido en
carne propia las nefastas consecuencias de la inundación, pues la parte del inmueble
en el que habito, en su frontera con el malecón Eguiguren, fue severamente
inundada. ¿Acaso ello conllevó a la RECONSTRUCCIÓN
del inmueble? De ningún modo, aunque sí fue menester realizar obras/tareas
tendentes a reforzar la estructura afectada por la humedad que requirieron más
de una peseta, además de perjuicios menores, como por ejemplo, mi computadora y
otros bienes y archivos sumergidos.
Confirmando la olla de grillos desatada
a raíz de la ¿bendita? RECONSTRUCCIÓN, tenemos la declaración de la flamante
ministra de Salud:
El hospital de
Sullana se hará por separado del hospital de Piura (imposible hacerlos juntos
al estar separados por m/m 40 kilómetros), y será comprendido en el erario de
la reconstrucción y el Ministerio de Salud.
Sin duda mi mente debe hallarse carcomida por
el paso de los años al ser incapaz de entender cómo diablos será posible
utilizar recursos destinados para la reconstrucción, en la edificación de un
hospital que, hasta la fecha, ni siquiera cuenta con los planos del arquitecto..
Si usted lo entiende,
estimado lector, lo felicito muy sinceramente.