LAMENTABLE  OMISIÓN

(Piura, 22 marzo 2019)

Luis Gulman Checa

La Comisión de Alto Nivel para la reforma política acaba de presentar sus propuestas, destacando la necesidad de restituir la Cámara de Senadores y eliminar el voto preferencial, entre otras menos trascendentes.

Sin embargo, sorpresivamente y desperdiciando una brillante oportunidad de modernizar nuestros procesos electorales, pasó por alto recomendar, en primer lugar y como muy urgente medida, ELIMINAR LA OBLIGACIÓN DE VOTAR.

Esta decisión no solo cae de madura ante la evidente arbitrariedad/atropello implícito en que los peruanos seamos obligados, bajo medidas coercitivas como es el pago de una multa económica, a ejercer un derecho, cuando, por propia definición, los mismos están a nuestra disposición para usarlos cuando nos de nuestra reverenda gana.

Una reflexión a modo de comparación referida al derecho de opinión:

¿Qué diferencia habría entre este atropello, con una ley obligando a cada peruano con DNI a publicar anualmente un artículo de opinión en algún medio?

¡Absurdo! ¡Irracional! A nadie en su sano juicio se le ocurriría proponer tremenda barbaridad (ruego a Dios que esta columna no la lea ninguna de las semi bestias actualmente en el Congreso). No obstante, sin apasionamientos, ¿acaso ambas imposiciones no serían igualmente abusivas y arbitrarias?

La reclamada eliminación, vista bajo otro cristal, en atención a la norma vigente e intocable concediendo el derecho al voto  a los analfabetos; se torna mucho más urgente porque difuminaría, abrupta y drásticamente, la enorme masa de personas desinformadas que bien podrían calificarse como carne de cañón de candidatos impresentables, corruptos, narcotraficantes, mineros delincuentes y, también, sujetos que tienen a su disposición plata como cancha, es decir, con capacidad de comprar  votos a cambio de dinero o dádivas.

Para agravar la punible omisión perpetrada por la citada Comisión, el reclamado VOTO FACULTATIVO (vota quien desee hacerlo) no es una disposición desconocida en la tierra y vigente tan solo en Marte, por cuanto hasta nuestros vecinos, Colombia y Chile, la tienen viva y coleando en su sistema electoral.

Desgraciadamente para el futuro del Perú, estos  comisionados ni siquiera fueron capaces de copiar  Así:

SEGUIREMOS JODIDOS.